Isla Flotante

La isla flotante es un postre que pertenece al repertorio familiar. Nunca lo he visto en otra casa, es una receta que mi madre ha preparado toda la vida.

Francamente delicioso, tiene una crema de vainilla que se mezcla con el caramelo de la base, una cobertura esponjosa de claras batidas y gratinadas con nueces, simplemente rico. Para probarlo y prepararlo siempre, idealmente un domingo en familia.

Para un molde cuadrado de: 20x25 (apróx.):

4 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de agua fría
3 yemas
2 cucharadas de maicena (fécula de maíz
3 tazas de leche entera
1 cucharadita de esencia de vainilla
3 claras batidas a nieve
1 1/2 cucharadas de azúcar (para las claras
Nueces picadas


Pueden utilizar un molde del tamaño indicado (o similar) o un moldes individuales. Sugiero usar uno de material de acero o teflón, a pesar que no luce tanto es bastante bueno para derretir el caramelo, a diferencia de la porcelana, que es bonita pero no buena inductora del calor.

Poner las 4 cucharadas de azúcar, más el agua en una ollita o directamente en el molde (me resulta mejor) y hacemos un almíbar, hasta que quede rubio oscuro. Con éste cubrimos el fondo y paredes del molde y dejamos enfriar.

Mientras tanto, se baten las 3 claras a punto de nieve, muy duras y, se agrega azúcar. Esto se vierte sobre el molde acaramelado y frío. Encima del merengue colocamos las nueces picadas y llevamos a horno con grill hasta que dore el merengue, ojo, que es sólo unos minutos.

Una vez listo reservamos.

Luego en una olla mezclar las 3 yemas con las 2 cucharadas de maicena y un poquito de leche fría, se revuelven con unas varillas  hasta que no haya grumos. Agregar las 3 tazas de leche y  la esencia de vainilla, llevar a fuego medio, siempre revolviendo hasta que de un hervor, entonces se retira de inmediato pues podría cortarse.

En caliente vaciamos esta crema a una jarra (resulta más fácil para usarla). Con una espátula levantamos un poco el merengue, sólo por un extremo y sin despegar mucha cantidad y por esa esquina se va colocando el batido, el cual quedará debajo de las claras.

Hacerlo con mucho cuidado para no romper el merengue.

Es muy importante que este proceso se haga con la crema caliente, pues luego que se enfría queda muy espesa y difícil de trabajar.
El postre puede parecer insípido, pero el caramelo aporta mucho dulzor, puedes subir las cantidades de azúcar de cada paso, pero sugiero tener cuidado en no dejarlo muy empalagoso.

El caramelo, la crema de vainilla y el gratinado del merengue con las nueces son todos sinónimos de un postre exquisito.

Que lo disfruten!